El 5 de febrero nuestro querido amigo Pablo Arango se nos fue dejando un gran vacío entre los admiradores de Eduardo Barreiros y entre los aficionados a los Dodge y grandes vehículos americanos.
Desde la Fundación Eduardo Barreiros, a la que estuvo vinculado desde nuestros comienzos -el Dodge Dart que luce en nuestro Museo fue de su propiedad-, queremos manifestar nuestro pesar y nuestro cariño a la familia de Pablo.
Descanse en Paz.