Madrid, 15 de mayo. Con motivo del 175 aniversario de la ingeniería industrial en España, el Paseo de la Castellana fue escenario de un espectacular desfile de vehículos históricos. Bajo el lema “Automóvil e Ingeniería: Una historia compartida”, el evento también conmemoró el 75 aniversario del Colegio Oficial de Ingenieros Industriales de Madrid (COIIM).
Más de un centenar de vehículos clásicos —incluyendo automóviles, motocicletas y vehículos industriales— participaron en esta celebración, organizada por el COIIM, la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Industriales (ETSII) de la Universidad Politécnica de Madrid, la Asociación Española de Profesionales de Automoción (ASEPA), el Instituto Universitario de Investigación del Automóvil (INSIA) y la Federación Española de Vehículos Antiguos (FEVA).
El recorrido, de carácter circular y con tres vueltas, convirtió el centro de Madrid en un auténtico museo del motor al aire libre. El desfile transitó por enclaves emblemáticos como la Plaza de San Juan de la Cruz, el Paseo de la Castellana y la Plaza de Cibeles, rindiendo homenaje a la contribución de la ingeniería industrial al desarrollo tecnológico, económico y social de España.
Entre los participantes destacaron marcas históricas como Hispano-Suiza, Pegaso, Ebro, Avia y Ford, además de autobuses clásicos de la EMT y ALSA. Barreiros también estuvo presente con dos joyas de la colección del Museo Eduardo Barreiros: el prototipo de camión militar TT9022 —conocido como «el Abuelo»— y el camión ruso ZIS-5, apodado «los tres hermanos comunistas», cuyos motores sirvieron de base para la conversión de gasolina a diésel que impulsó Eduardo Barreiros entre los años 40 y 50, marcando un hito en la historia de la automoción española.
También desfilaron otros vehículos Barreiros de coleccionistas particulares: el camión Barreiros Súper Azor Gran Ruta de Eduardo Delgado; el Dodge Dart Station Wagon (SW) de la colección del Museo Eduardo Barreiros; el Dodge 3700 GT del PMM de Jorge García Córdoba; el histórico Dodge Dart 270 Panorámico de la familia Marrodán; el Dodge Dart 270 Cabriolet de Enrique Gómez Erustes y el Simca 1000 GL de Fernando Gallego.
El evento fue un éxito rotundo y ofreció una oportunidad única para que entusiastas del automóvil, familias y amantes de la tecnología revivieran una parte fundamental del patrimonio industrial y automovilístico del país.
